Una nueva polémica se instauró este jueves cuando YouTube decidió cerrar la cuenta de Pablo López Riobo, un fanático de las corridas de toros. En su canal era posible encontrar entrevistas, reportajes y faenas completas, lo que motivó la censura.
Según un portavoz de YouTube, el problema sería menor si los videos fuesen de toreros con la capa o la muleta, algo que muchos entienden como censura a la libertad de expresión.
YouTube indica que tienen todo el derecho a retirar los contenidos que no cumplan con los términos y condiciones, incluyendo actividades como consumo de drogas, fabricación de bombas o maltrato y abuso de animales, tal como las corridas de toros.
Asimismo, el portal afirmó que las reglas son iguales en cualquier país del mundo, que no hay excepciones puntuales y que no disponen de personal que vigile todo el movimiento que se genera en la red social. Por ello, deben ser los mismos usuarios quienes denuncien las malas prácticas de otros miembros de la comunidad y si el número de usuarios que se sienten afectados por el contenido multimedia es alto, también éstos serán retirados.
En Twitter, son varios los usuarios que apoyan el retorno del canal censurado e incluso han elevado una petición que hasta ahora lleva poco más de 500 firmas.
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